En medio de la crisis de abastecimiento de agua que enfrenta Bogotá, los estudiantes de bachillerato han reflexionado sobre sus hábitos de consumo y promueven acciones concretas para reducir su huella hídrica, dentro del marco del Objetivo de Desarrollo Sostenible 14. Utilizando una plataforma virtual, los estudiantes ingresaron datos sobre sus hábitos de consumo diario, como el tiempo que pasan en la ducha, la frecuencia con la que lavan la ropa y la cantidad de agua que utilizan para regar las plantas. Al analizar los resultados, muchos de ellos se sorprendieron al descubrir un alto promedio de consumo anual de agua, en comparación con los estándares mundiales. En este sentido, propusieron alternativas como:

• Reducir el tiempo en la ducha.
• Cerrar el grifo mientras se cepillan los dientes o se lavan las manos.
• Recolectar el agua de lluvia para regar las plantas.
• Utilizar electrodomésticos eficientes en el consumo de agua.
• Promover campañas de sensibilización en sus comunidades.

Esta actividad demuestra el poder transformador de la educación ambiental. Al ir más allá de las aulas, este tipo de iniciativas empoderan a los jóvenes para convertirse en agentes de cambio y contribuir con un futuro más sostenible.

La crisis del agua en Bogotá es un llamado a la acción que implica compromiso y creatividad para demostrar que es posible actuar de manera responsable y contribuir a la construcción de un planeta más verde y resiliente.